El 2014 ha sido un año de retorno
a los concursos después de un 2013 prácticamente sin criar, el 2012 fue un año
plagado de problemas pero con muchas satisfacciones en los canarios incluyendo
la medalla de plata en el nacional. Al finalizar ese año 2012 tuve que salir de
muchos canarios clave de mi aviario y ceder otros a buenos amigos,
afortunadamente el 2013 pasó pero apenas salieron 18 pichones y la verdad,
ningún macho que valiera la pena, así que no concursé el pasado año. Para el
2013 comencé a tratar de recuperar la base de mi aviario, fue un proceso complicado
que me trajo muchas sorpresas, aparte de las malas, donde aquellos que se
consideraron mis competidores poco ayudaron pero debo destacar con nombre y
apellidos a aquellos que desinteresadamente me ayudaron a recuperar mis
trabajos principales: los criadores panameños Ángel Sánchez y Gustavo
Quintero, Carlos Dacarett y
principalmente Javier Lobato, quien
me abrió las puertas de su casa y de su aviario, escogiendo lo que necesité de allá. Pocas, muy
pocas o ninguna persona harían eso por un amigo. Y así con 84 pichones (muchos,
demasiados), con un audio muy complicado pasé el 2014 hasta llegar a los
concursos. En el camino perdí muchos pájaros que apuntaban a ser increíbles, a
veces pasaba una semana fuera de casa con los pájaros enjaulados sin poder
moverlos, ¿el resultado? Casi todos perdieron repertorio significativamente,
algunos enfermaron con graves afonías y apenas un puñado de pájaros, y en
particular dos: el 27 y el 29, dos hermanos que desde la voladera exhibían brillantes
ejecuciones de las notas más complejas- El otro gran pájaro era un pio isabela
plata, número 100, excesivamente nervioso, poco cantarín y a ratos
excesivamente rápido pero con una dicción privilegiada.
- Con este me la juego- le dije a
Javier- pero solo tú lo podrás sacar adelante- y vaya que si lo hizo.
Javier ha desarrollado un oído
que más de uno quisiera tener pero una de sus mejores competencias en el mundo
de timbrado es que sabe trabajar muy bien los pájaros, casi todos suelen cantar
cuando él los entrena. El 27 y el 29 son espectaculares pero el 100 va a ser
mejor- decía.
Los primeros concursos
transcurrieron, Colmenar Viejo, 3
ejemplares con 93 puntos, 27, 29 y 90. 27 y 29 muy merecidos, la anilla 90
inmerecido, jamás le hubiese puesto más de 90, pero así es esto. Un Segundo lugar un Quinto Lugar. Todos
desempatados con otros 5 pájaros. EL 100 decide no cantar.
Aranjuez, el 27 arranca con otro 93 pero queda 4, muy polémico este
concurso. EL 100 dio dos timbres y no siguió cantando. Yo no estaba pero alguno
que otro más maruja que timbradista y sobretodo bastante envidiosos decían que
el pájaro apretaba los timbres.
Zaragoza, otra vez el 27 y el 29 se salen, 93 y 93, primero y
segundo y mejor pájaro.
Alcobendas. El 27 con 93 y, sorpresa el 100 se sale con 93 puntos.
Primero, Segundo, mejor pájaro y mejor criador.
Las Rozas, solo llevo al 100 con otro pio plata que acababa de
traer. El 100 se sale, 94 puntos para un Primer Individual.
En paralelo, ese mismo día, en Leganés (CODAT) salen el 27 y el 29
junto a otro lote, el 27 saca 93 puntos y sale sexto.
Talavera de la Reina. Concurso nacional, tengo ahora ya más
esperanzas con el 100 que cuando sale a cantar es una verdadera
exhibición. Y lo hace. Se sale y saca 93
puntos. Medalla de Oro con un plata.
Increíblemente castigan con 90 y 89 al 27 y al 29. Es lo que hay. Ya la
temporada está hecha, que más se puede pedir.
Madrid (CTEM), casi “muerto
al llegar” dos lotes a las 915 y 930 am con cinco grados afuera, los pájaros
todos fallan incluyendo el 100 que apenas logra hilar unas estrofas del
repertorio para 90 puntos. El lote de la
tarde tampoco rinde mucho, no hacen ni la mitad de las cosas, 90 y 91. Al día
siguiente llueven los pájaros con 91, nada que hacer, ni rindieron.
Lamentablemente el azar nos ha jugado una mala pasada. Para borrar cualquier
duda, el concurso lo ganan unos pájaros espectaculares de Jose Guerrero, un
timbradista de los pocos que trabajan muy bien genéticamente.
La verdad es que no me puedo
quejar para nada, ha sido un retorno muy bueno, ahora a trabajar las líneas, ya
conocemos lo que hacen los machos en detalle: velocidad, tesitura, amplitud y
complejidad de repertorio así que ya sabemos qué hacer con las hermanas. Para
el 2015 está decidido: de 30 a 40 pichones máximo, algo manejable y con mucho
foco.
En resumidas cuentas, ha subido el nivel, cada
vez hay más timbradistas educando y cada vez mejores timbrados. Este timbrado,
completo, cargado de floreos y compuestas y de una dicción privilegiada es el
camino del timbrado de este milenio. Atrás quedaran los que no se monten en el
tren y sigan argumentando que para ir de Madrid a Valencia es mejor ir de rodillas
que coger el AVE. Lo que una vez iniciamos como un proyecto para impulsar este
tipo de timbrado va cogiendo cada vez más fuerza y esta fuerza la dan los
timbrados que estamos sacando. El nivel va subiendo en los concursos haciendo
más mas competitivos los concursos y por ende más equitativos los resultados. En Venezuela y Colombia solo hay cabida para
este tipo de timbrado, esperemos que pronto también USA se sume a la tendencia
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