Recientemente leía en un foro que uno de sus
miembros decía que de un cruce entre n macho con moñas y una hembra de cabeza
lisa había obtenido tres polluelos con moña de los cuatro, recordé entonces
otros comentarios que he escuchado en el pasado:
- Ese macho da solo hembras -
y otros por el estilo donde se establecen conclusiones
a veces con una vehemencia desproporcionada a partir de análisis puramente empíricos.
Obviamos entonces la estadística y la teoría de probabilidades que es la que usada, por ejemplo, para describir el producto de un cruce entre dos canarios.
Usando el ejemplo del cruce entre un macho con
moña y una hembra de cabeza lisa, la teoría dice es que habrá un 50% de los
individuos que presentaran moña y el otro 50% cabeza lisa. Para una nidada
compuesta por cuatro individuos todas las posibles combinaciones (espacio
muestral) son (siendo M pollos con moña y L pollos con cabeza lisa):
{MMMM,MLLL,MMLL,MMML,LLLL,LMMM,LLMM,LLLM,LMLM,LMML,MMLM,MLLM,MLML,LMLL,MLMM}
En esa muestra de 4 pichones solo en dos ocurre
que el 50% de los pichones poseen moña. El tamaño de la muestra (un cruce) no
es estadísticamente representativo y si repitiéramos el cruce (experimento) un
número suficiente de veces, la tendencia resultante sería 50% Moña y 50% Lisa.
Las probabilidades descritas en los cruces son simplemente eso, probabilidades
que en el caso de 50% denotan la misma probabilidad de ocurrencia en una muestra
grande pero quizás irrelevante en muestras pequeñas que son con las que solemos
trabajar los criadores.
Sin duda convertir un caso en regla es pueril. Pero no hay que olvidar que la biología es una ciencia empírica y son los modelos los que se han de ajustar a los hechos, y no al contrario.
ResponderEliminarLa naturaleza es compleja y no siempre se explica con la aplicación simple de las leyes de Mendel y las proporciones que éstas indican. Por ejemplo, en los humanos no nacen el mismo número de niños que de niñas como sería previsible(en 2016 en España hubo una diferencia de un 2% a favor de los chicos). Además, se ha comprobado estadísticamente que entre las parejas humanas hay una tendencia a tener hijos de un determinado sexo. Esto es asi, entre otras cosas, porque las condiciones en las que se produce la fecundación determina que sea más probable un sexo que otro. En definitiva, que viendo el ejemplo de los humanos no es descabellado pensar en la existencia de una cierta predisposición de un ejemplar o una pareja hacia una cierto sexo o característica. Queda aquí abierta una línea de investigación... ;)
Casualmente comentaba un caso de estos extraños esta mañana con un macho portador de bruno cruzado el año pasado con dos hembras ancestrales y originando en el 2015 5 pichones todos brunos (hembras), este año en su primer apareamiento 3 pichones todos brunos (hembras), hablando con un experto criador el asume que en todos los cruces que haga con ancestrales el cromosoma sexual que porta el gen de dilución bruno es dominante y que solo me daría machos si lo apareo con una hembra bruna. Quizás haya casos como estos donde realmente lo que "falla" es el diseño del apareamiento.
ResponderEliminarInteresante y en la linea de tu comentario.