Dos buenos criadores: Jose Arleo y Emilio Guilarte (QEPD)
escuchando noveles del 2005. Guilarte poseia un oido impecable
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Ya concluida la temporada de cría y habiendo
distribuido oportunamente nuestros noveles en varias voladeras con el fin por un
lado mitigar el riesgo de que un pájaro o varios no estropeen al resto así como de
generar pájaros diferentes a pesar de escuchar el mismo audio, es ya hora de
pasar el máximo tiempo posible (compatible con obligaciones laborales y
sobretodo familiares) escuchando los primeros esbozos de la partitura que
nuestros jóvenes canarios ejecutarán. Pero sobretodo es también tiempo de
inflexible y rigurosamente ir depurando y separando a aquellos que exhiben características indeseables, definamos estas condiciones como:
1.- Exhiben un repertorio muy corto (posiblemente 4 o 5 notas) acompañado de una
exhibición de celo prematuro con comportanmiento típico de cortejo
2.- Aquellos pájaros que exhiban roces, nasalidades u otros defectos que aunque no estén contemplados en el código de canto desmerecen la ocasión por lo
impertinente de su aparición o lo desagradable a nuestro oído.
Recordemos que en un ecosistema de educación
para los canarios timbrados hay tres fuentes importantes de insumo para el ave:
1.- Fuente
de Audio contentiva del material de aprendizaje, es precisamente la única
que deseamos que aprendan.
2.- La ejecución
de un novel avezado tiene una influencia muy alta en el resto de sus compañeros de voladera.
3.- Fuentes
de audio o ruido externo a nuestro aviario pero que pueden influir notablemente
sobre todo si se trata de sonidos habituales en el entorno para nuestras aves. Como ejemplo
cito: aves que se acercan varias veces al día, ruidos mecánicos que puedan ser
replicados por los noveles. Otra fuente de audio externo (y quizás la más
común) es el canto de machos adultos o los intentos de las hembras adultas por
ejecutar algún que otro giro de su predilección.
Apunto además, por considerarlo oportuno que
esta situación está presente en los aviarios de aquellos que predican no educar ya que los casos 2 y
3 estarán presentes siempre a menos que el sistema de educación (o no
educación) contemple someter al ejemplar
a un aislamiento total. De no ser así,
los ejemplares más avanzados estarán educando al resto de la voladera querámoslo
o no.
Es muy importante actuar lo más rápido y rigurosamente posible separando a estos ejemplares del resto de los noveles. Y aquí debo hacer otro alto: ¿Tenéis el oído suficientemente desarrollado para distinguir las características indeseables de un repaso complicado o en el mejor de los casos os parece intelegible? Si no estáis seguros acudid a un compañero de afición experto que los oiga y os de su opinión. Todo esto para evitar cometer errorres y no descartar algún ejemplar promisorio.
La segunda parte de la ecuación es que hacer con estos ejemplares, aquí aplica claramente uno de los miembros insignes del rico refranero español: "cada maestrillo con su librillo" - En mi caso y dado que el espacio del que dispongo posee una división acústica, los muevo al área de los adultos exponiendolos a otro audio y a un macho adulto lo más limpio posible, Estos ejemplares dificilmente serán los campeones de algún concurso pero el intento de eliminarles las características indeseables bien merece la pena.
Las causas de estas condiciones indeseables para aquellos que educáis usando métodos digitales pueden ser:
1.- Condciones genéticas no adecuadas para la ejecución de giros contenidos en el material de aprendizaje.
2.- Audio defectuoso en un algun enlace o de baja calidad en general
3.- Copia de algún ejemplar adelantado que presenta dicha condición
No llego a estas alturas. Pero, creo que, con estos artículos, se aprende leyendo a quien expone sus verdaderas sensaciones y conocimientos.
ResponderEliminarGracias Ernesto.