Transcurrida la época de cría
numerosos criadores tienden a hacer un lado a sus ejemplares reproductores y
centrar su atención en los jóvenes pichones que comienzan a hacer sus pinitos
canoros. Ésta en mi opinión es una práctica errónea por varias razones:
1) Desconocemos el resultado de
nuestros cruces y es muy posible que debamos a reutilizar nuestra base genética
representada en estos ejemplares.
2) De cara a procesos selectivos
mucho más precisos y conociendo nuestra base reproductora puede ser necesario
el uso de alguna característica genética particular representada en uno de
estos ejemplares cruzándolo con alguno de los ejemplares obtenidos en la recién
concluida temporada.
3) Se puede hacer necesario repetir
un cruce realizado en la anterior temporada de cría ya que resultó exitoso.
En el caso de las hembras, si bien
es cierto podemos alojarlas de forma colectiva sin ningún problema debemos
procurar que la jaula o voladera sea de un tamaño que permita que se puedan ejercitar de manera que se evite la obesidad. Se les debe proporcionar una alimentación
balanceada suministrando además de alimentos verdes, complementos vitamínicos, sin que falte el hueso de jibia (siempre debe estar disponible) y grit.
Es además necesario enfatizar que el número de ejemplares debe ser proporcional a las dimensiones de la jaula. Otro aspecto de importancia es la necesidad de “cortar” el celo lo antes posible al momento de introducirlas en la jaula destinada a la muda y evitar puestas de huevos que lo único que hacen es disminuir su vida útil como reproductoras ya que seguro sabéis que el número de folículos con que nacen determina el número de huevos que pondrán durante su vida. Para lograr este cese del celo algunos criadores se valen de trucos como colocar unas gotas de limón en el bebedero, pero quizás la acción más efectiva sea alejarlas del canto de los machos si disponemos de espacio suficiente en nuestro aviario. Por otro lado y ya lo he señalado en varias ocasiones no debemos colocar las hembras adultas cerca de los pichones ya que muchas de ellas son capaces de hacer giros cortos y otros sonidos que pueden ser aprendidos por los noveles.
24FQ11-11 en su voladera para la muda
Es además necesario enfatizar que el número de ejemplares debe ser proporcional a las dimensiones de la jaula. Otro aspecto de importancia es la necesidad de “cortar” el celo lo antes posible al momento de introducirlas en la jaula destinada a la muda y evitar puestas de huevos que lo único que hacen es disminuir su vida útil como reproductoras ya que seguro sabéis que el número de folículos con que nacen determina el número de huevos que pondrán durante su vida. Para lograr este cese del celo algunos criadores se valen de trucos como colocar unas gotas de limón en el bebedero, pero quizás la acción más efectiva sea alejarlas del canto de los machos si disponemos de espacio suficiente en nuestro aviario. Por otro lado y ya lo he señalado en varias ocasiones no debemos colocar las hembras adultas cerca de los pichones ya que muchas de ellas son capaces de hacer giros cortos y otros sonidos que pueden ser aprendidos por los noveles.
En el caso de los machos, aunque
muchos criadores de igual manera los alojan de forma colectiva yo soy
partidario de colocarlos en jaulas aislados pero con suficiente espacio para
mantenerse en forma y no en jaulas de pequeñas dimensiones donde su capacidad
física disminuirá progresivamente
haciéndolos vulnerables a diversas enfermedades.
En mi caso particular, yo sacrifico
espacio selectivamente y alojo a los tres mejores reproductores en voladeras de
un metro para cada uno. ¿Porqué lo hago? me he dado cuenta (y esto es una
observación absolutamente empírica) que cuando los ejemplares tienen espacio
para ejercitarse a placer no solamente conservan su condición física sino que
además su capacidad reproductiva por varios años. Es por ello que hay criadores
que poseen ejemplares de siete, ocho e inclusive nueve años de vida que son
todavía fértiles a pesar de su longevidad.
No dejo de mencionar que si poseemos
voladeras suficientemente grandes podremos alojar durante la muda a hembras y
machos colectivamente con la finalidad de lograr los objetivos descritos
anteriormente.
Como nota adicional de precaución no
debemos confundir una alimentación balanceada y completa con una alimentación
abundante o una condición de desbalance nutricional que conduzca a nuestro
ejemplar a un estado de obesidad no deseado.
Por último, con el mismo interés que
nos ocupamos de prestarle las mejores condiciones a nuestros mejores ejemplares
reproductores debemos también ser inexorables con aquellos ejemplares cuyos
atributos genéticos son negativos o indeseables en la persecución de nuestros
objetivos como canaricultores.
Estimado Sr. Ernesto Ramos.
ResponderEliminarAl hacerme seguidor de su blog, tenía claro y creo que no me he equivocado, que iba a aprender. Así, cada día que pasa, este aprendiz, un poco mayor de edad, pero aprendiz, ha acertado. Leo y aprendo muchas cosa que, allá `por los años 80/90 cuando criaba, no sabía y, hoy, tampoco.
Por ello le doy las gracias y espero seguir empapándome de su gran trayectoria como criador y experto canaricultor.
En mi caso, después de reiniciar la cría y adquirir buenos reproductores a gente avezada en el tema, no me puedo quejar en mi vuelta "al trabajo", ya que, a día de hoy, entre voladera y casi a punto de salir para dicho sitio, tengo treinta pollos. Es más, creo que alguna pareja, aunque por aquí, -Huelva-, ya hace mucha calor, sacará para adelante una tercera postura.
Saludos y seguiremos en contacto,
Muchísimas gracias por su comentario José Antonio, son este tipo de comentarios los que motivan a seguir escribiendo y tratar de plasmar mis experiencias y las de otros compañeros de afición. ¡Buena afición al timbrado hay en tierra onubense!. Por sus comentarios entiendo que va bien encaminado al éxito en su vuelta al timbrado. Le deseo mucha suerte y espero nos conozcamos algún día. Un saludo
ResponderEliminardon ernesto tenga usted muy buenos días soy de colombia antioquia y crio timbrado español soy muy nuevo y quisiera preguntarle si es bueno colocarle musica clasica a mis pichones que estoy preparando para el concurso muchas gracias
ResponderEliminarHola le puedes colocar musica clasica como barrerar acustica entre el audio pero si la pones como fuente principal de enseñanza no aprenderan gran cosa de ello.
EliminarUn saludo
Tengo muy biuenos amigos en la Asociación Colombina Onubense de canaricultura -ACO- a la que pertenezco. Por finales de los 80 y comienzos de los noventa era criador nacional, pero al dejarlo, por razones de trabajo, perdí el número. Hoy, veinte años después, me han dado el HB-40.
ResponderEliminarCriadores como José Luis Plaza, Juan Aquino, Pepe Fábregas y Gregorio Coronel me han cedido unas parejas y, con ellas, he empezado. Entre éstas hay machos con 90 y 91 puntos, por lo que, en principio, tengo buena "madre". Como quiera que, al estar jubilado, tengo bastante tiempo, espero no defraudarle a mis timbrados. Es más, como por aquellos entonces, criaba el timbrado isabela, he reservado para este año una pareja de ellos a Faustino Bernabé.
Por último, decirle que, como comprobará, si pincha en mi nombre también tengo un blog "Reclamo y Naturaleza", en donde escribo un poco sobre todo lo que me gusta.
Saludos y, por supuesto que, si algún día pasa por estas "benditas" tierras, me gustaría conocerlo.
Muy bueno su Blog amigo Jose Antonio lo he estado leyendo un buen rato.
EliminarUn saludo
Muy buen punto de vista Ernesto, la mayoría de los criadores una vez se termina la temporada de cria se desentienden, dicho sea entre comillas, de los reproductores y bajo mi opinión y como bien vienes a dar a entender a los reproductores hay que darle el mismo trato que al los noveles.
ResponderEliminarPor regla general y al tener espacio de sobra todos los años mis reproductores después de la temporada de cria an ido a espacios amplios, hembras a una habitación de x 4 y machos a jaulones de metro, desgraciadamente este año no cuento con ese espacio y tendrán que estar un poquito mas apretados.Un saludo
Haces muy bien Ignacio, yo tuve un hiatus en el 2013 y gracias al buen estado de mis adultos pude recuperar la base de trabajo que vengo puliendo.
EliminarUn saludo