lunes, 29 de septiembre de 2014
martes, 23 de septiembre de 2014
Un inciso de ética previa al concurso
En Octubre del 2012
escribí un artículo en el blog llamado “De las Normas de
“Etiqueta” y Comportamiento en los Concursos de Canto”,
este artículo que tuvo una muy buena acogida entre los lectores, hace referencias
a un conjunto de normas, que, idealmente, deberían ser observadas con
rigurosidad durante los concursos, de forma tal, que éstos se celebren
pincelados de una justa capa de transparencia.
Como en toda afición, siempre existe un
pequeño grupo de aficionados dispuesto a cualquier cosa con tal de obtener un
premio. Afortunadamente son una minoría, los hemos visto dándoles patadas a las
maletas de otros participantes disimuladamente o haciendo alguna trampa en el
sorteo para que sus aves sean enjuiciadas por aquel juez que pudiera puntuarlos mejor. Entre esa lista de normas se encuentra la
relacionada con la interacción entre jueces y participantes durante el
concurso: “Debe evitarse cualquier tipo de interacción entre los concursantes y el
juez durante el enjuiciamiento. En el mejor de los casos el juez no debería
saber quiénes están presentes durante el enjuiciamiento.”
Hoy quiero referirme al grado de
interacción que debe existir entre jueces y participantes antes de celebración
de los concursos. Si, antes de los concursos. Ciertamente, los jueces son, en
muchas ocasiones también compañeros de afición, de club y en muchas ocasiones
amigos. Y ese también es uno de los
aspectos que más debemos cuidar como aficionados, no sólo en respeto a los
demás compañeros de afición y los jueces sino también a nosotros mismos.
Es
necesario que tengamos cierto pudor en esta época previa al inicio de los
concursos cuando ya nuestros ejemplares dejaron atrás sus primeros pinitos canoros
y ya nos inflan el pecho con el preludio de un repertorio rico en complejidad y
adornado con una suerte de dicción y lentitud. Otros, llenos de dudas, escuchan
a sus aves y dudan, dudan porque unos días parecen buenos y al día siguiente no
los aguantan, dudan porque son noveles, dudan porque no son todavía capaces de
reconocer a un buen timbrado con absoluta seguridad, y estas dudas son
perfectamente normales. Lo ideal, si dudáis, es pedirle a un compañero que
tenga experiencia y criterio que os escuche los pájaros y os de su opinión.
Pero
lo que si no debéis hacer es enviar audios o videos a jueces para que os den su
opinión, no solamente porque no sería justo con el resto de los compañeros sino
porque indirectamente estaríais sometiendo al juez a un dilema moral, aun
cuando esto no sea intencional y suponiendo además los atributos morales y
éticos del mismo.
De igual manera
resulta no solo polémico sino poco transparente pedirle a un juez que os lleve
los pájaros a un determinado concurso, malo para el juez malo para vosotros.
Por supuesto, estas reflexiones
tendrán impacto en aquellos aficionados de comprobado valor moral pero serán
esquivadas por aquellos dispuestos a todo por un premio.
lunes, 22 de septiembre de 2014
Algunas observaciones sobre el proceso del repaso a la cristalización del canto
Uno de los
aspectos fundamentales de la canaricultura de canto es la apropiada gestión del
canario novel desde la voladera hasta
los concursos, a pesar de que ya he escrito un par de artículos sobre como
hacerlo apropiadamente creo conveniente hacer algunas observaciones que
facilitarán la comprensión del proceso. Es en esta etapa cuando se nos puede ir
al garete el trabajo de todo un año, muchas veces por tomar decisiones
equivocadas fomentadas principalmente por dos factores: la ansiedad por conocer
el repertorio del ave y la angustia por asegurarse que el ave está lista para
concursar. Es entonces cuando la creatividad aflora y le hacemos cambios
violentos a la alimentación del ave que de por sí ya está sometida a un gran
stress al ver su espacio de actividad reducido súbitamente a unos pocos
centímetros. Este proceso de adaptación aunque inducido por el canaricultor, no
puede violentarse y ha de seguir su normal evolución independientemente de la
fecha de los concursos. Es decir, cuando sacamos al canario de la voladera,
éste ha de estar en el momento apropiado (que no es el mismo para cada ave) y
tardará entre 20 y 40 días en cristalizar el canto-
El objetivo
final es lograr una adaptación efectiva a la jaula de concurso caracterizada
por la mínima pérdida de “silabas” aprendidas en la voladera así como una ave
totalmente adaptada a su nuevo entorno presta a demostrar sus mejores virtudes
al ser colocada sobre la cabina de enjuiciamiento. Para que un canario esté en
condiciones de participar en un concurso debe haber cristalizado su canto (en
el argot popular, “cerrado su canto”). La cristalización del canto se caracteriza
por dos condiciones: el canario ya tiene las “impresiones neurales” de su
repertorio y la definición de los enlaces entre notas.
Las etapas que caracterizan todo
este proceso son: Enjaule, Consolidación, Cristalización, Apogeo y
Declive. Veamos en mayor detalle cada
una de ellas:
Enjaule: Consiste en trasladar el ave desde la voladera hasta una
jaula de pequeñas dimensiones para iniciar el proceso de desarrollo de
territorialidad que como es sabido es uno de los factores claves para que el ave
cante. Además una jaula de concurso o
de pequeñas dimensiones permite gestionar el ave individualmente de manera
efectiva. Se recomienda, de ser posible, un enjaule paulatino a fin de
minimizar el stress. En particular, si hay un número reducido de aves, la mejor
manera es colocar las divisiones de rejilla a la voladera y colocar a un
canario en cada espacio por al menos cuatro o cinco días. En mi caso particular
suelo criar entre 80 y 100 pichones con lo cual no siempre me es posible
hacerlo. Sin embargo suelo alojar en estas voladeras a aquellos ejemplares que
son más susceptibles al enjaulamiento por temas fenotípicos (por razones que
clasificaré de empíricas, los de pluma clara) y aquellos que exhiben conductas nerviosas
en la voladera. De hacerse el traslado
directo a jaulas de concurso o a valencianas colocaremos los pichones viéndose
entre ellos por un periodo de entre 5 y 7 días. De observar a algún ejemplar
con conductas agresivas o sexuales hacia el compañero de la jaula contigua
procederemos a dejar esta jaula sin que pueda ver a sus compañeros. Como indique, no todos maduran simultáneamente
por lo que se hace necesaria la gestión individual. Durante estos primeros días
se reforzará la alimentación diaria con pastón en un lengüetero además de
colocar unas gotas de complejo vitamínico en el agua. SI estamos educando
debemos seguir exponiendo al ave al material educativo durante las etapas de
enjaule y consolidación a fin de reforzar el aprendizaje del ave. Después que
ha cristalizado el canto, no es necesario exponer al ave a ningún tipo de
material auditivo. En este periodo suelo basarme en alpiste y nabina como
elementos base junto al pastón y dosis semanales de fruta o vegetales. De vez
en cuando añado un poco de mijo blanco para variarles la mezcla que es 80%
alpiste y 20% nabina o colza. Debemos abstenernos por completo de usar semillas
que los exciten como el cañamón y la semilla negra ya que corremos el peligro
de producir aceleración y recorte en el canto. Es esta etapa es además innecesario
y contra-productivo ”darles mesa” a los pájaros o guardarlos en las maletas.
Consolidación: Es la segunda etapa más crítica, el canario ya ha
superado su adaptación a una jaula de menores dimensiones y se esmera en sus
repasos, escuchándose cada vez con más claridad. Como ya se señaló, debe haber
exposición al material educativo además de mover al ave para que cante bajo
diferentes condiciones. Esta etapa tiene una duración entre 20 a 35 días. Se
puede inferir que si enjaulamos a un canario en el momento adecuado, éste
cristalizará su canto en aproximadamente cuatro semanas. También merece la pena
comentar que este proceso no es lineal sino que sigue a una curva casi
exponencial después de las dos primeras semanas, con lo cual quiero indicar que
el pájaro avanza muy rápido después de este periodo. Me permito dar un trio de
recomendaciones:
1.- No darle mesa a los canarios durante las dos primeras semanas ya que
esto acelera la cristalización del canto creando un riesgo de que se pierda
parte del repertorio presente en el repaso.
2.- Agrupar las aves por tipo de canto de forma tal que se apoyen entre
ellos en este proceso tan crítico.
3.- Ser inflexible en el descarte de aquellos ejemplares que presenten
giros indeseables ya que fácilmente pueden afectar al resto.
Cristalización, apogeo y declive: Una
vez que el canario cierra su canto, tiene todos sus giros “impresos”
neuralmente, el canario estará por unas semanas con toda la extensión de su
repertorio, tengamos muy en cuenta a aquellos ejemplares que tienen un
repertorio extenso, capacidad de improvisación, dicción y velocidad de emisión.
El canario está listo para concursar y durante unas semanas mantendrá su
repertorio al máximo (fase de apogeo), esta fase concluirá cuando el nivel de
testosterona se incremente produciendo un canto recortado o centrado en algunos
giros en particular, en particular los más simples. Una vez llegada esta fase ya carece de
sentido presentar al canario en concursos ya que el ave deja de rendir. La influencia del celo es variable para cada
ejemplar y se puede dar el caso que un ejemplar no presente mayores variaciones
en su canto mientras que otros prácticamente se ceban con un grupo muy reducido
de notas. Cuando el canario inicie la muda al finalizar el periodo de
reproducción, el nivel de testosterona bajará en conjunción con el proceso de
neurogénesis facilitándose entonces la adquisición de nuevas silabas por parte
del ejemplar (plasticidad del canto).
miércoles, 17 de septiembre de 2014
lunes, 15 de septiembre de 2014
Visita Inesperada
Hoy he empezado a sacar algunos pichones recien enjaulados, como suelo hacer, sentarme a escucharlos armado de una taza de café, a eso de las 630 am todos los dias en los que no estoy viajando. Hoy me sorprendió el sobrevuelo muy cercano de un halcón que culminó posandose en uno de los árboles de mi jardin. Los he tenido que guardar apresuradamente en el aviario. No ha pasado mas allá de un susto pero os comparto la imagen de la singular amenaza.
Concursos FOCDE 2014
Aquó os dejo una lista preliminar de los concursos de FOCDE del 2014, ha costado mucho sacar la información ya que estaba duplicada y mezclada entre el 2013 y 2014. La iré actualizando, entretanto esta os puede ser útil.
viernes, 5 de septiembre de 2014
Consejos para un enjaule correcto (versión revisada y ampliada 2014)
Llego Octubre, época en la que es costumbre
sacar a los jóvenes timbrados de las voladoras y enjaularlos para que terminen
de cristalizar su canto. La excitación ronda en los aviarios y los criadores,
noveles y expertos acrecientan su interés con particular ansiedad pasando cada
vez más horas frente a sus ejemplares tratando de determinar la calidad de su
trabajo. Escuchamos un floreo de particular complejidad y se nos acelera el
corazón, queremos volverlo a escuchar, llamamos a un amigo canaricultor y le contamos,
otros, usan la tecnología de los teléfonos inteligentes y envían el audio o el
video de sus noveles a sus compañeros de afición esperando impresionarlos, y
los que no están tan seguros de lo que escuchan, en el mejor de los casos esperan
obtener retroalimentación. Tened mucho cuidado de no dormiros en los laureles
con la incipiente ejecución puesto que un mal manejo puede dar al traste con
todo el esfuerzo de un año.
La paciencia es sin duda el activo más
preciado de cualquier canaricultor, debemos sobreponernos a nuestras ansias de
tener a nuestros ejemplares alojados en sus jaulas de concurso y ejecutar los
pasos gradualmente llevando al ejemplar de un repaso inteligible a la ejecución
impecable de su repertorio. Es común cometer errores en esta etapa que pueden
tener desenlaces desagradables que van desde la pérdida de parte del repertorio
que el ejemplar ejecutaba en la voladera hasta una muda a destiempo o en el
peor de los casos la muerte del ejemplar. Es frecuente escuchar entre los
aficionados:
“Hacía
de todo en la voladera, lo enjaulé y se quedó solo con lo básico o con las
notas menos complejas”.
En
todo caso, el factor crítico a vencer es el stress, fenómeno al que se enfrenta
el canario al ser “arrancado” de su zona de confort y confinarlo a un espacio
muy reducido de una manera abrupta después de haber disfrutado “a sus anchas”
en una voladera durante los primeros meses de vida.
No hay manera de que esta etapa no sea
traumática para el ejemplar, y lo que debemos hacer como criadores
responsables es hacérsela lo menos estresante posible, a fin de lograr una
pronta y efectiva adaptación a su nuevo “hábitat”. No podemos ni debemos
saltarnos las etapas necesarias: enjaule, preparación para los concursos y
concursos. Cada una de estas etapas requiere un tratamiento diferente por
parte del criador.
Es importante destacar que es tan malo precipitarnos en enjaular como no
hacerlo a su debido tiempo, el dejarlos más tiempo del necesario produce
ejemplares de escaso repertorio que repiten incansablemente las mismas notas,
que de paso suelen ser las más simples del material de aprendizaje. Por otro
lado es necesario resaltar que el proceso de enjaule, a menos que tengamos
restricciones de espacio u otra variable, es un proceso individual y
es que nuestros canarios no maduran a
la vez, como en el resto de los seres vivos, hay individuos precoces y
otros que tardan un mayor tiempo en madurar.
Es por ello que no debe sorprendernos que un
pichón nacido en Febrero puede no dar ningún indicio y estar repasando
incipientemente y otra nacido a finales de Abril ya muestra un repertorio
completo, ha mudado y nos pide que lo enjaulemos.
Por otro lado debemos estar muy conscientes
que al enjaular provocamos una serie de cambios hormonales en el ejemplar al
fomentar el desarrollo del instinto de territorialidad, el cual, para el joven
canario, ahora se circunscribe a las reducidas dimensiones de la jaula de
concurso. Este cambio hormonal, que acelera en la mayor parte de los casos la
evolución normal de su repaso, posiblemente ocurrirá unos meses más adelante
para aquellos ejemplares que viven en libertad en las montañas y valles de la
macaronesia
A continuación estructuro una serie de pautas
que os recomiendo seguir al momento de enjaular.
Saber cuándo
enjaular: en un
artículo que escribí en Octubre de 2012 señalaba algunos elementos críticos
para determinar si un ejemplar está listo o no para el enjaule, a saber:
Plumaje:
el pájaro debe haber completado su muda, no deben presentarse cañones en su plumaje que denoten que este
proceso no ha sido completado.
Actitud: debemos tener en cuenta el
comportamiento del ave dentro de la voladera, un ejemplar con un comportamiento
agresivo con sus congéneres o de acercamiento sexual es conveniente separarlo
ya que su comportamiento altera el equilibrio en la voladera y su canto
atropellado puede ser copiado por el resto de las aves. Separar el ejemplar no
significa necesariamente enjaularlo y comenzar su preparación para los
concursos, debemos evaluar otros factores.
Canto: el repaso debe haber quedado
atrás, la mayor parte de las notas deben ser inteligibles, aunque las atropelle
y las reordene a su antojo, eso es perfectamente normal en esta etapa.
2.-
Enjaular por etapas: Yo utilizo un
método de encerramiento paulatino principalmente porque me lo puedo permitir, y
suelo hacerlo por etapas: primeramente muevo a los pichones a jaulas de 30 cm
que son mucho más espaciosas que las de concurso, allá los tengo un par de
semanas y de allí los muevo a jaulas de tipo valenciana en un mueble-escuela,
esto me permite escuchar de manera
individual a cada ave y además hacer que el proceso de acortamiento de
espacio sea paulatino. Sólo aquellas aves que considero aptas para concursar
son colocadas en las jaulas de concurso de dos a tres semanas antes del
evento. Idealmente si disponemos de muy pocos ejemplares en la voladera podemos
usar los divisores de la voladera dejando que se vean los ejemplares, claro
está que estamos limitados a tres o cuatro ejemplares por voladera.
Es altamente indispensable que los ejemplares
recién enjaulados se vean entre si
durante los primeros cinco a siete días. Una vez más, como el proceso de
maduración es individual puede que entre nuestros canarios recién separados haya
alguno que exhiba un celo subido o muestras fehacientes de territorialidad, en
estos casos ya podemos dejar al ejemplar en su jaula sin que vea a ninguno de
sus compañeros.
4.- Examinar la jaula a diario:
Debe volverse una norma el examinar el fondo
de la bandeja en busca de plumas y observar además la consistencia de las
heces. Si el número de plumas es alto, examinaremos al ejemplar y de notar que
al tomarlo pierde más plumas lo retornaremos a la voladera con la esperanza que
no realice una muda fuera de ciclo que lo inutilice para los concursos. La
inspección visual de heces es una valiosa herramienta para determinar la salud
de ejemplar.
5.-
Suministro vitamínico y refuerzo: Al ser
enjaulado, el canario se estresa y reduce su ingesta producto del stress, es
conveniente reforzar su alimentación con pastón. En particular yo uso una
mezcla de germen de trigo, salvado de avena, pastón y brocolí a diario.
6.- El camino a la cristalización del canto: Una vez
enjaulado el canario acelera su evolución desde el repaso hasta el cierre o
cristalización del canto. Debemos escucharlo todos los días con la finalidad de
monitorizar su progreso y detectar faltas o defectos. Si estáis educando debéis
dejar que el canario escuche el material de aprendizaje a diario. Es muy
importante no encerrar a los pájaros en las maletas ni sacarlos sobre la mesa
como si los estuviésemos preparando para el concurso. Esto debe solo hacerse
cuando el canto esté cristalizado.
miércoles, 3 de septiembre de 2014
Artículos con Etiqueta........
Ahora podéis acceder más fácilmente al contenido de blog ya que a mano derecha os encontraréis los contenidos del blog clasificados mediante una etiqueta, muchas gracias a José R. Menéndez por esta sugerencia.
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